OTRA PERSPECTIVA
El error histórico de la expulsión masiva de
latinos en EE.UU.
Opinión de Jose Rafael Moya Saavedra
Desde hace décadas, los
latinos han sido el pilar de la economía estadounidense. Han trabajado en los
campos, la construcción, la industria y el comercio, sosteniendo el desarrollo
de ciudades como Los Ángeles, Chicago y Houston. Hoy, con la radicalización de
las políticas migratorias bajo la administración de Donald Trump, nos
encontramos ante un error histórico sin precedentes: la expulsión masiva de
trabajadores esenciales.
El vacío laboral y el impacto económico
inmediato
Las cifras ya lo demuestran:
el colapso de sectores productivos es inminente. Con la desaparición de
trabajadores latinos, se reportan:
· Cosechas
sin recolectar, con pérdidas millonarias en la agricultura.
· Obras
en la construcción paralizadas por falta de mano de obra.
· Negocios
locales con estantes vacíos y sin empleados.
· Restaurantes,
hoteles y servicios esenciales con una crisis de personal.
El impacto es inmediato y
devastador. La economía estadounidense, que depende del trabajo migrante, está
tambaleando.
La contradicción de la narrativa antiinmigrante
Desde la Gran Marcha del 2006 la
Ley Sensenbrenner: los latinos han demostrado su peso en la estructura de
EE.UU. La actual crisis demuestra que su ausencia no solo es notoria, sino
catastrófica. La pregunta ahora es:
·
¿Cuánto tiempo tardará en revertirse esta
política antes de que el país entre en un declive económico mayor?
·
¿Las empresas y los líderes económicos
presionarán para frenar la expulsión de trabajadores esenciales?
Las grandes corporaciones, que
durante años se beneficiaron de esta mano de obra, ahora enfrentan una crisis
de producción sin precedentes. La administración de Trump ha subestimado el
impacto de la migración en la economía nacional.
Efectos electorales y el despertar de la
resistencia
Históricamente, la persecución
de comunidades migrantes ha generado un despertar social. En el 2006, la Ley
Sensenbrenner provocó marchas multitudinarias y un "Día Sin
Inmigrantes" que demostró el peso económico de los migrantes. Ahora, la
ausencia masiva de trabajadores podría convertirse en una huelga involuntaria
que haga tambalear la política migratoria de Trump.
En estados clave como Arizona,
Texas y Nevada, la comunidad latina podría definir las elecciones.
La economía en crisis podría ser el punto de inflexión para que sectores empresariales y políticos reconsideren la política de deportaciones.
Un punto de inflexión histórico
El vacío que deja la comunidad
latina en EE.UU. está generando una crisis sin precedentes. Las decisiones
políticas actuales no solo afectan a los migrantes, sino a la propia estructura
económica del país. Si la expulsión masiva de trabajadores esenciales no se
revierte, Estados Unidos podría enfrentar una recesión impulsada por su propio
error histórico.
El tiempo corre y la pregunta clave es: ¿cuánto
resistirá la economía sin la columna vertebral que la ha sostenido durante
décadas?