jueves, 10 de julio de 2025


 

OTRA PERSPECTIVA

Justicia con rostro joven

A propósito del Informe IJEJ y el caso mexicano

En un continente donde la justicia a menudo parece un edificio frío, lejano y blindado, un grupo de jóvenes se atrevió a tocar la puerta. No pidieron permiso: exigieron ser escuchados. Así nació el Informe IJEJ (Informe de Jóvenes por la Ética en la Justicia), una radiografía urgente de cómo las juventudes de América Latina y el Caribe perciben, enfrentan y transforman los sistemas de justicia.

Lejos del lenguaje técnico, este informe habla desde el cuerpo y la calle. Desde la rabia de ver cómo la ley castiga más que cuida. Desde el anhelo de una justicia que no sea un trámite, sino un puente. Y desde la convicción de que la ética no es un adorno en la justicia, sino su cimiento más profundo.

Diez claves para entender lo que dicen los jóvenes

  1. La justicia debe ser ética, no solo legal.
    Que no se conforme con aplicar códigos, sino que escuche, respete y repare.
  2. Las juventudes no quieren ser objeto de leyes, sino sujetos de cambio.
    Reclaman participar activamente en la reforma judicial.
  3. El acceso real a la justicia sigue siendo una promesa incumplida.
    Las barreras económicas, lingüísticas y territoriales son reales.
  4. La justicia no puede seguir ignorando la diversidad cultural.
    El enfoque decolonial e intercultural debe estar en el centro.
  5. Desmilitarizar no es una consigna radical, sino una condición para vivir.
    La justicia no puede operar con lógica de guerra.
  6. Los sistemas judiciales deben hablar el lenguaje de la gente.
    Basta de tecnicismos que excluyen a quienes más necesitan justicia.
  7. La educación legal debe formar conciencia, no solo profesionales.
    Se trata de formar defensores éticos, no solo abogados hábiles.
  8. La justicia climática debe tener lugar en los tribunales.
    Defender el territorio también es un acto de justicia.
  9. Se necesita una justicia verdaderamente independiente.
    Libre de presiones políticas y económicas.
  10. Las propuestas ya están sobre la mesa.
    Ahora le toca a los gobiernos, jueces y ministerios de justicia escuchar y actuar.

 El caso México: entre la impunidad y la dignidad

Lo que jóvenes denuncian en otros países, en México duele más porque es cotidiano.

  • Criminalización de la juventud:
    En barrios empobrecidos, portar gorra o tatuaje puede ser sentencia. Protestar, motivo de expediente. Ser joven en México, para el sistema penal, es casi una presunción de culpa.
  • Militarización como política de Estado:
    Las fuerzas armadas han ocupado espacios de seguridad y justicia. La consecuencia: violaciones de derechos, falta de transparencia y aumento del miedo entre juventudes organizadas.
  • Desconfianza total hacia las instituciones judiciales:
    La justicia en México no solo es lenta: es percibida como corrupta, parcial y politizada. Para muchos jóvenes, acudir a un tribunal no es buscar reparación… es arriesgarse a ser revictimizado.
  • Obstáculos invisibles pero brutales:
    Jóvenes indígenas o rurales enfrentan sistemas que no hablan su idioma ni entienden sus formas de vida. Las defensorías públicas colapsadas, la falta de intérpretes y la lejanía territorial agravan el problema.
  • Pero también hay propuestas:
    En el informe, las juventudes mexicanas no se quedan en la denuncia. Exigen formación ética para jueces, defensorías comunitarias, justicia ambiental, inclusión de sus voces en las políticas públicas y, sobre todo, una justicia que les vea como parte de la solución y no del problema.

 Una justicia que escuche, que transforme, que abrace

El Informe IJEJ no es una queja: es un proyecto. Es un grito, pero también un plano de reconstrucción. Y su mensaje es claro: la justicia, para ser justa, debe mirarse desde abajo. Desde los ojos de quien nunca ha sido escuchado. Desde las juventudes que resisten, que sueñan, que no se resignan.

En México, este llamado es doblemente urgente. Porque el dolor es hondo. Porque la impunidad es rutina. Pero también porque las juventudes mexicanas han demostrado que saben organizarse, proponer y construir.

Si queremos un país donde la ley no sea un privilegio, sino una garantía…
Si queremos jueces que miren a los ojos, y no desde arriba…
Si queremos paz con justicia, no solo orden con miedo…
Entonces escuchemos lo que aquí se dice.

Y actuemos.

📚 Fuente consultada

Informe IJEJ – Jóvenes por la Ética en la Justicia. Informe de experiencias, reflexiones y propuestas de las juventudes para una justicia ética en América Latina y el Caribe. Edición 2023. Fundación Avina, Open Society Foundations, Due Process of Law Foundation. Disponible en: https://informes.ijejusticia.org

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